En la nueva sección “Salud en Armonía” que dirigen la Dra. Denise Nuñez y la Dra. Edith Shiro a través de Instagram Live, el pasado martes 7 de febrero ambas profesionales conversaron sobre un tema que ha generado importantes discusiones en la sociedad durante las últimas semanas: el crecimiento de la cultura Sephora y la tendencia “Sephora Kids”, sus riesgos emocionales y las posibles soluciones que los padres deben adoptar para evitar este problema.
Actualmente, en las tiendas Sephora, una de las cadenas más importantes de distribución de productos de belleza, cada vez son más las niñas de entre 9 y 12 años de edad que se pueden observar eligiendo todo tipo de cremas y maquillaje de uso estético, que por lo general está dirigido a un público de mayor edad.
Este fenómeno nació en las redes sociales y forma parte de una tendencia conocida como “Sephora Kids” o Niñas Sephora.
Pero, ¿de dónde proviene esta tendencia?, ¿cuáles son sus consecuencias emocionales en menores de edad?, ¿qué pueden hacer los padres para esquivar estas actitudes impulsadas por las redes sociales? En este artículo, las Dras. Denise Nuñez y Edith Shiro nos traen la respuesta a estas incógnitas.
¿Qué es la tendencia Sephora Kids?
Sephora Kids es una tendencia que inició en la red social TikTok, y que se ha extendido a otras redes como Instagram Y Facebook, la cual promueve el uso de cremas y productos de belleza de la marca Sephora, en niñas de 9 a 12 años.
La Dra. Edith Shiro indica que, “las niñas, y a veces niños también, siguen tutoriales en Instagram, Facebook o TikTok, que invitan al uso de cremas, dietas y algún tipo de ropa, como una forma de enviar un mensaje de lo que es aceptado y lo que no”.
Este fenómeno suele afectar fácilmente a los menores de edad, precisamente por el hecho de que se encuentran en una edad en la que, según comenta la Dra. Shiro, son más propensos a seguir las pautas que establecen las redes sociales, con el objetivo de pertenecer a un entorno social.
¿Por qué este tipo de tendencia logra persuadir a los menores de edad?
Algo que se suele desarrollar durante la etapa de la adolescencia y preadolescencia, es el sentido de pertenencia en los grupos sociales. Si bien en la niñez el modelo a seguir de los niños suelen ser los padres, durante esta etapa, el modelo cambia al grupo social que rodea al adolescente.
En el Instagram Live, las Dras. Denise Nuñez y Edith Shiro comentaban que el ser humano es un ser sociable por excelencia. Esto quiere decir que parte de nuestra existencia, depende de las conexiones que logramos con los demás.
En el momento en que estas conexiones se rompen, ya sea con amigos, sociedades o familia, sobrevivir se vuelve un reto cada vez más difícil para la persona. A esto se le llama “miedo de supervivencia”, y se manifiesta con frases como “Si no me mantengo en el estatus de lo que establecen las redes, no voy a sobrevivir”.
¿Cuáles son las consecuencias emocionales de este tipo de tendencia en niños y adolescentes?
Este tipo de comportamiento en el que una persona trata de seguir tendencias con el objetivo de encajar en algún grupo social, o ser aceptados de alguna manera por su entorno, suele causar importantes daños emocionales, especialmente en los menores de edad que están en pleno desarrollo.
La constante comparación que surge como resultado de seguir tendencias como “Sephora Kids”, genera consecuencias como:
Ansiedad.
Miedo.
Ataques de pánico.
Falta de autoestima.
Cada una de estas consecuencias pueden manifestarse a través de cambios en la actitud del adolescente, la falta de energía social, la poca motivación para realizar actividades con sus amistades, entre otros.
Como padres, ¿qué podemos hacer para evitar la tendencia?
Para la Dra. Denise Nuñez, muchas veces son los padres quienes refuerzan este problema al llevar a los niños a realizar este tipo de compras, reforzando las ideas impuestas por tendencias de redes sociales como “Sephora Kids”.
Sin embargo, también es una realidad el hecho de que muchas veces existe en los padres el miedo a establecer límites en sus hijos, por temor al rechazo o al corte de la comunicación entre padres e hijos.
Teniendo esto en cuenta, ambas profesionales brindan las siguientes recomendaciones que pueden aplicar los padres ante este tipo de tendencias:
Establecer límites y reglas claras
A diferencia de lo que los padres suelen creer, establecer límites a los niños y reglas claras en lo que pueden hacer y lo que no, lejos de causar un quiebre en la relación paternal, puede ayudar a reforzar la seguridad del menor de edad, haciéndole sentir protegido y resguardado por personas de confianza.
Además, este tipo de acciones les permite desarrollar la disciplina y el buen comportamiento que les permitirá desarrollar una personalidad correcta y responsable en su futuro.
Conversar con los padres del núcleo social
Otro de los consejos que comentan las Dras. Denise Nuñez y Edith Shiro para evitar las consecuencias de la tendencia “Sephora Kids” es conversar con los padres del núcleo social del menor que demuestre interés en este tipo de tendencias, ya que es muy probable que sea una actitud compartida entre sus amistades.
De esta forma, es posible que todos establezcan las mismas normas a sus hijos, para que así exista un mayor apoyo social con límites similares entre el grupo de menores.
Establecer una rutina de lectura antes de dormir
Para la Dra. Denise, iniciar una rutina antes de dormir puede ser esencial para desarrollar la disciplina y la atención a los límites y normas que se establezcan en el hogar. Esta rutina puede ser tan simple como: tomar una ducha a las 7:00 pm, cenar a las 7:15 pm y a las 7:30 leer un libro.
Esta rutina, al repetirse todas las noches, se convierte en una regla que el niño o niña debe seguir. Además, según varios estudios, los niños que se exponen a la lectura desde temprana edad, tienen mejores calificaciones en sus escuelas. Por lo tanto, se trata de una acción que aporta tanto a nivel emocional como educativo.
Acudir a consultas dermatológicas
La mayoría de los videos que se puede observar dentro de la tendencia “Sephora Kids”, suelen recomendar el uso de productos estéticos para evitar problemas en la piel, o imperfecciones como arrugas, etc.
Para evitar que un menor siga estas tendencias, una solución podría ser llevarlo a consulta dermatológica, para así dejarle ver que no necesita ningún tipo de producto estético o de belleza a su edad.
Reemplazar las pantallas y establecer límites de uso
Muchos padres cometen el error de permitir a los niños el uso de pantallas por largos períodos de tiempo, sin supervisión y desde una temprana edad. Es importante recordar que el cerebro es un órgano que está en evolución hasta los siete años de edad, y aproximadamente hasta los 21 sigue ajustándose.
En esta etapa de desarrollo una persona puede absorber todo el contenido visual al que se expone, precisamente porque el cerebro se encuentra en pleno desarrollo. Además, el primer año de vida es clave porque es en esa etapa en la que el cerebro se desarrolla en al menos un 50%.
Para evitar la exposición a contenido que pueda ser nocivo para el correcto desarrollo de un niño, es importante limitar el uso de pantallas en menores, e incluso reemplazar estos dispositivos por artefactos que no sean electrónicos, como por ejemplo libros de dibujo, legos, manualidades, juegos de mesa, etc.
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Límites claros crean niños seguros y emocionalmente sanos
En conclusión, la tendencia "Sephora Kids" representa un desafío significativo para la salud emocional de niñas y adolescentes, ya que promueve estándares de belleza inalcanzables y genera ansiedad, miedo y baja autoestima.
Sin embargo, como padres es posible mitigar estos efectos estableciendo límites claros, fomentando la comunicación con otros padres y promoviendo actividades alternativas que no estén centradas en las redes sociales ni en la belleza superficial.
Si quieres conocer más sobre temas de salud infantil o agendar una consulta profesional para abordar alguna conducta inusual fomentada por este tipo de tendencias virtuales, no dudes en comunicarte con la Dra. Denise Nuñez, quien estará a tu disposición para asegurar el correcto desarrollo físico y mental de tus hijos.